martes, 28 de noviembre de 2017

17. Domadora de tristezas



Querido Elio, en el vacío que se forjó con tu ausencia, cuántas historias pude haberte contado. Quiero pensar que las habrías absorbido con interés desde tus ojos hechos de cielo y mar, ofrendándome esa sonrisa en la que soñé ver tu alma.

Se transita la vida a la sombra de los recuerdos que dejan las experiencias de la niñez. No se olvida el dolor, los temores, con el tiempo cambian de cara. Lo que todavía persiste en mis evocaciones es el mutismo que se expandió en la familia después de la muerte de mamá. El mutismo que fue mi acompañante solitario.  

A los trece años hice una prueba, una especie de voto de silencio, eliminando hasta los monosílabos o las frases mínimas de la comunicación cotidiana. Ninguno preguntó qué me pasaba y cada cual siguió en lo suyo. Nuestro padre, al volver de sus clases de latín e italiano, refugiaba su opacidad en el dormitorio. Sonia, tímida, poco valorada, comentaba únicamente los problemas domésticos. Vos aún estabas en el exilio y Bruno ni me veía, ocupado en acumular la fortuna que se había propuesto conseguir.

Yo era una mancha desvaída, como un personaje de película fuera de foco, en un plano secundario. Pensé que no era real, quizás me soñaba a mí misma.

Ahora se acabó la familia y no tengo nostalgias de nadie, ni siquiera de vos. Solo queda tu nombre, la cara atemporal de una fotografía en mi biblioteca y la certeza de que te idealicé tanto que me sería imposible reconocerte ahora, un hombre ya mayor.

Bruno vive en Miami y nos hablamos por teléfono con mucha más frecuencia de la que me hubiera imaginado. La larga conversación que mantuvimos en un café antes de irse, con el tiempo llevó a cabo su labor: mitigó resentimientos, deshizo algunos nudos que parecían indisolubles.

Con Sonia la relación se consolidó y ahora somos madre e hija del alma; disfruto que en su vida haya placidez y pequeños proyectos. En nuestras sesiones de recuerdos siempre me habla bien de vos. Dice que la trataste con respeto y hasta le trajiste un regalo al regreso de uno de tus viajes. Me lo mostró: ese delicado cofrecito de madera labrada, que aún guarda en su interior el aroma del naranjo con el que fue hecho.

En cuanto a mi vida, si la miro con el ojo exitista de esta época, es un completo fracaso. Hace veinte años que enseño en el mismo Instituto y sigo instalada en el monoambiente que me dio César, un buen hombre al que no conociste. Pude armar un taller de arte, no tengo muchos alumnos, me gusta elegir a los que les veo una vocación auténtica, no busco más.

Traté de hacer exposiciones con mis obras, presenté books con fotos de mis trabajos en varias galerías de arte. Los rechazaron, ninguno cuadraba con el “estilo” que ellos requerían. Comprendí que al rechazo también contribuía mi falta de interés por exponer. Había escuchado más las sugerencias de las voces externas que a las internas: ellas me decían que no necesitaba grandes exhibiciones.

Dejé de ocuparme en esa tarea estéril y volví a lo mío: pintar. En mi mente empezó a surgir un murmullo leve que pugnaba por modelar una idea. Cuando el mensaje fue claro lo concreté, se ajustaba a “mi” estilo.

Un diciembre, con el apoyo de Iván, el dueño del café al que voy seguido a escribir, organicé una muestra con los trabajos de los alumnos y agregué algunas de mis pinturas. A la gente del barrio le gustó la movida cultural y ahora la hacemos cada dos o tres meses. Estos eventos sencillos me proporcionan entusiasmo, ganas y tuve la satisfacción de que me compraran varios cuadros.

Fui una mujer urdida sobre un sedimento de melancolía y por un tiempo demasiado largo caminé con la tristeza cosida a los ojos y una sonrisa amable para enmascararla. Continúo batallando con esta languidez endémica y me siento como una domadora de tristezas.

 Después del divorcio con César, me afirmé en la creencia de que no me enamoraría. Hubo otras relaciones equivocadas y me vi como un animalito cerril que no se adaptaba ni entregaba a nadie, atrincherada detrás de la débil sonrisa cortés. En mi corazón se habían silenciado los sentimientos y deseos por un hombre, solo era una masa de fibras palpitantes del grosor de un puño.

Hasta que conocí a Iván y entré en un puro tembladeral de emociones en las que me hundía y elevaba, flotando en mi deshielo. Sé que también le atraigo, lo percibo en su mirada y cuando sus manos rozan las mías. Supongo que los dos tenemos miedo y no queremos herirnos, él también arrastra experiencias dolorosas.

Con esta carta sin destino te suelto, te dejo libre, querido Elio.

No investigué tu posible paradero, si estabas todavía en esta dimensión o te habías ido a alguno de los planos infinitos de los que se compone la eternidad.

Preferí inventarme una historia, imaginarte una vida calma, lejos de guerras y odios, sin demasiadas zozobras, escribiendo un libro sanador que catalizara errores, para perdonarte y perdonar a los que te desterraron..

Te veo en aquella casa modesta, que visité hace muchos años, con el fin de desentrañar el secreto de tu pelea con Bruno. Esa casa con rejas en las ventanas que dan a la calle, donde escuché voces y risas de niños, que fueron creciendo y te dieron nietos. Quizás te desconcentren de tus reflexiones, de la escritura, te traigan a la realidad y entonces les brindes el amanecer de tu sonrisa. La vida anónima que elegiste es serena junto a Micaela, la mujer que siempre amaste. Así anhelo creerlo.



Fin



Queridos amigos, no quise dejarlos con la intriga sobre el desenlace de la historia. Mis disculpas por publicar un borrador del último capítulo, pero no estoy en condiciones de corregirlo.

Tengo a mi única hermana internada en estado grave. Por eso tampoco contestaré los comentarios y no podré visitarlos.
Leí con gran emoción los que me dejaron y también leeré los de este capítulo. 

Les agradezco enormemente que me acompañaran en
la aventura de publicar esta nouvelle.

Los abrazo a todos contra mi corazón. Gracias, gracias y hasta pronto...




Sinopsis

Piera (1970): rememora y reflexiona sobre momentos claves de su historia. Es maestra de arte y artista plástica. También decide recurrir a la escritura para profundizar más su viaje al pasado.
Luciana, su madre, muere cuando Piera tiene diez años. Renzo, su padre, al poco tiempo de enviudar se casa con Sonia (la Segunda). Es profesor de francés, italiano y latín. Cae en depresión con la muerte de Luciana. Elio, es el hermano dieciocho años mayor, muy querido por Piera. Es periodista. Estuvo poco en la casa, durante la dictadura militar tuvo que exiliarse. Bruno es el segundo hermano -con el que Piera se lleva mal- es agente financiero y su única preocupación parece ser el dinero. Tiene una feroz pelea con Elio, que es echado de la casa por su padre. Ella desconoce lo que ocurrió entre los hermanos.
César es abogado, Piera se casa con él a los veintiún años y se separa cinco años después. Es César quien le da indicios sobre el secreto familiar. Piera visita a Micaela (que fue la novia de Bruno) y ella le confirma la sospecha de César: que con Elio eran amantes.
Al poco tiempo de separarse de César, muere repentinamente el padre de Piera y Bruno vende la casa familiar sin consultarla. También hace trampas con el testamento. Ante la soledad de Sonia, Piera empieza a acercarse a ella. Piera encara a su hermano y obtiene su parte de la herencia y la de Sonia.



©  Mirella S.   — 2017 —






51 comentarios:

  1. Primero, espero de corazón que todo se solucione. Como tenga que ser, te entiendo porque tengo una única hermana que no la pasó bien este año.
    Después, gracias por esta historia Mirella.
    Beso grande y contas conmigo. Mi mail esta en el blog por si te dan ganas de charlar con alguien.
    Fuerza.

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  2. Apenas veía que agregaste la información sobre tu situación familiar. Espero no se prolongue mucho. Te mando un gran abrazo querida amiga.

    Veo que tuve razón al pensar en que con Bruno se abriría una relación. Me ha gustado mucho el final querida Mirella. A pesar de las tristezas acumuladas se puede ser el horizonte con una sonrisa.

    Te abrazo fuerte querida amiga.
    Beeeesos.

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  3. Hasta pronto Mirella. Te agradezco esta nouvelle tan bella, es la vida real la que camina por sus capitulo, somos nosotros en algún personaje que nos refleja y nos conmueve.
    Dios te de fuerzas en este momento. Te dejo un fuerte abrazo y nuevamente gracias por regalarnos la maravilla de tu arte.

    mariarosa

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  4. Primeramente desearte que tu hermana se restablezca muy pronto, y como se suele decir hay que tener mucha fe en estos casos, pero seguro que sana. Lo primero sois vosotras, así que no te preocupes en absoluto en visitar a nadie. Bueno en cuanto a esta historia, que también has trazado, y que parece ser, que en parte son vivencias propias, tengo que decirte, que aunque la vida no ha sido un camino de rosas, por el último capítulo que publicaste, yo también tenía la sensación que la relación con Bruno, sería mucho más estrecha de lo que hasta ahora había sido. Perece ser que aunque la novela, no tenga un final de cuento de hadas, las cosas entre la familia, dentro de lo que cabe se han ido suavizando.

    Besos y abrazos Mirella.

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  5. Mirella, mis amigos mejores deseos de recuperaciòn para tu hermana.
    Fruto de la casualidad veo este relato nada más abrir el dispostivo. Texto que me abdujo por completo nada más empezar. Y entre tantos fragmentos interesantes, lo del voto de silencio me pareció absolutamente genial.

    Un cálido abrazo cargado de energía para las dos.

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  6. Querida Mirella. Lo primero quiero desearte de corazón que tu hermana se recupere pronto.
    Tu relato me ha gustado mucho. Me ha parecido un final esperanzador para le hermosa Piera.Muchos besos

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  7. Querida Mirella, espero que todo vaya bien y te mando mucho ánimo y fuerzas. El final de la historia es brillante con esa carta al aire a Elio en el que le cuenta todas las vicisitudes que la acompañan y en la que describe el encuentro de esa especie de serenidad en su vida.
    Me ha encantado la vida de Piera, Mirella.
    Un besazo muy grande.

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  8. Querida Mirella, deseo que tu hermana mejore aunque nos comentes que está grave, porque la esperanza es lo último que se pierde y yo quiero pensar que todavía sigue habiendo posibilidad de recuperarse y ojalá no me equivoque. También quisiera ofrecerte mi modesto apoyo en esta distancia, tratando de acortarla para que sientas más cerca mi presencia y mi consuelo.
    Bueno, para lo que necesites, aquí me tienes y no hace falta que me agradezcas nada.

    Confieso que me cuesta hoy dejarte mi opinión sobre este último capítulo, ya que me había acostumbrado a sentarme en esa mesa camilla junto a tus personajes, observar sus silencios, sus miradas, sus encuentros y desencuentros... ¡Confieso que a partir de ahora guardaré en ese cofrecito de madera labrada con olor a naranjo, toda esta gran historia de Piera! ¡Gracias por haberme hecho partícipe también!

    No me sorprendió que al final, optases por equilibrar la balanza y que Piera haya preferido inventarse una historia tranquila, sin zozobras, donde se instale el perdón; perdonar y perdonarse a si misma por tantos errores cometidos, entre unos y otros. La vida ya tiene demasiadas aristas, como para añadirle otras nuevas.

    Permaneceré a este otro lado del océano, tratando de enviarte más pájaros para que los conviertas en palabras, tal y como tú sabes hacerlo.

    Un gran abrazo y mi apoyo en estos difíciles momentos.

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  9. Un abrazo, mucho animo y todo mi apoyo, pediré por que todo se resuelva de la mejor manera posible.

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  10. Lo primero, es lo primero, mi Bella Dama.
    Cuídate y cuídala, y gracias por esta entrega, que aprecio más que ninguna otra por el delicado detalle respecto a nosotros y este espacio, y más sintiéndote en estos inesperados momentos que la vida nos envía.

    Me sentí atraída por todo el relato desde su complejidad humana hasta su inmensidad cubierta de esa esperanza de la gente que dejó de creer y para quien la vida es un regalo, pese a todo.
    Una capa humana, una piel fina...
    Quizá se deba a la empatía que sentí con Piera aunque con nombres y lugares distintos de principio a fin...

    Te abrazo, y sabes que para lo que precises, ahí estoy, y estaré en el mismo lugar de siempre.

    Te pienso. Y es algo que no pienso dejar de hacer...
    Hasta pronto, Mirella.






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  11. Querida Mirella, cuánto siento leer sobre el momento tan triste y delicado que atravesáis en la familia. Espero de todo corazón que tu hermana mejore y que pronto podáis dejar atrás este episodio como una mera anécdota ya superada.

    Respecto a la historia, le has dado un fantástico final que remata, como una guinda perfecta, lo leído hasta ahora. El éxito de una vida no se mide por lo que piensen los demás, sino por lo que sienta uno mismo sobre lo que es y lo que hace. En ese sentido yo creo que Piera sí tiene una vida exitosa, es feliz y tiene el resplado emocional de personas que la quieren. También me ha gustado que su relación con Bruno haya mejorado un tanto, es como debe ser :))

    Muchas gracias por habernos compartido este magnífico final a pesar de las circunstancias, has sido muy generosa.

    Te envío un gran abrazo y mis mejores deseos. ¡Ánimo!

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  12. espero que todo vaya bien

    Relato sobresaliente

    besos

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  13. Desearte que el problema de tu hermana se solucione satisfactoriamente ...
    el relato un gran regalo... gracias

    abrazos

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  14. Siempre es una maravilla leerte. Tue personajes se cuelan en el corazon y tardas en olvidarlos.

    Un abrazo fuerte :)

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  15. Guardado a buen recaudo este capítulo, ya te lo comentaré con más calma.
    Ahora lo importante es que tengas fuerza para ayudar a tu hermana y fuerza y ánimos para ti misma.
    Un abrazo muy muy fuerte Mirella, y todo mi cariño.
    Hasta pronto.

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  16. Querida Mirella espero que tu hermana mejore muy prontito, muchos ánimos y mis mejores deseos para que esa recuperación sea lo más pronto posible.
    Sobre el desenlace de la novela, muy bonito final porque por fin Piera se ha podido liberar y ahora sí puede intentar ser feliz.
    Un beso enorme

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  17. Guapa, siento mucho por lo que está pasando tu familia, espero que todo se solucione. Te mando mucha fuerza y muchos ánimos.
    Respecto a la historia de Piera, me ha encantado, la trama y los personajes, cada uno de ellos me ha mantenido enganchada.
    Un besazo enorme, guapa!

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  18. Hola Mirella,
    Espero que todo tenga solución, te mando mucho ánimo y cariño. No debiste preocuparte por nosotros y colgar esta entrada.
    Sobre el capítulo, a las personas que no están presentes se las suele idealizar, pero como le ha pasado a Piera llega un momento en que se necesita viajar al pasado y a los recuerdos para descubrir que no todo era como la imagen creada.
    Me alegro que finalmente haya podido desterrar a todos los fantasmas, emocionalmente la tenían muy atada. Pero lo que más me alegra del relato, es que los quedan están aprendiendo a quererse pero sobre todo a comprenderse. Es un final precioso, toda la historia y vida de Piera lo ha sido.
    Un beso enorme.

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  19. Hermosa,... ha valido la pena seguirte!

    Muchos ánimos Mirella,...

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  20. Un final impecable y digno de la historia de Piera la cual por fin, parece haberse liberado de lastres y el último paso con esta carta que deja abierta en su imaginación, la hace merecedora de encontrar el amor y la felicidad. Siento que se ha perdonado a ella misma a la vez que perdonado a los demás. Ahora es libre.

    En cuanto al grave estado de tu única hermana, deseo que todo salga bien y recupere pronto. Entiendo perfectamente tu situación y ánimo. Tu compañía será para ella un bálsamo.

    Gracias por esta historia tan enternecedora en la que he disfrutado leyendo con tu excelente narrativa.

    Un fuerte abrazo, Mirella.

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  21. Todo mi fuerza para ti y tu hermana, ojalá pronto superéis esta situación. Un fuerte abrazo a ambas.
    Un excelente cierre con esa carta que nos habla de lo vivido por Piera una vez la familia quedó atrás, en el recuerdo. Estremecedor el final de la carta con ese deseo de que Elio tenga una apacible y feliz vida. Brillante final epistolar que aumenta la sensación de nostalgia, de fin de la historia. O al menos de esa etapa.
    Lo dicho, un fuerte abrazo!!

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  22. Mis mejores deseos y oraciones para pedir por la recuperación de tu querida hermana y mucha fortaleza para ti mi querida mirella.
    Gracias por esta maravillosa novela que compartiste hasta su capítulo final a sido una interesante historia la de Piera.
    Besos, con un fuerte abrazo y mi deseo que todo mejore.

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  23. Antes que nada Mirella, desear una pronta recuperación de tu hermana y enviarte desde la distancia todo el apoyo que pueda hacerte llegar. Ánimo y que todo pase pronto.
    Nos queda la sensación de un gran trabajo el que has hecho con esta serie de capítulos en torno a la vida de Piera. Imaginación desbordante para labrar la historia de los lazos familiares de la chica. El final abierto nos deja algunas dudas resueltas y otras incertezas que la propia protagonista llena en su memoria con el final que le gustaría que hubiera sucedido. Al menos encontró cierta paz y estabilidad tras una infancia y juventud convulsas.
    Un abrazo y hasta pronto Mirella. Besos.

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  24. Espero de todo corazón que tu hermana se recupere pronto, Mirella. Mucho ánimo.
    En cuanto a la historia, creo que es un borrador perfecto, que no necesita cambiar ni una coma. Siempre te digo que me gusta mucho tu estilo literario, elegante y con sentimiento. Veo en este desenlace mucha melancolía, pero al mismo tiempo me parece percibir calma, pues Piera parece encontrarse en un momento de la vida en el que ha perdonado y se deja llevar por la corriente, para bien y para mal.
    Espero con ganas poder seguir leyendo más de tus historias.
    Un fuerte, fuerte abrazo.

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  25. Una vez intenté algo similar y pasé casi 6 meses sin hablar con mis hermanas, viviendo en la misma casa, claro, ni siquiera se percataron de ello...

    Saludos y suerte,

    J.

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  26. Un gran final y un espléndido modo de comunicarlo.

    Te envío un fuerte abrazo.

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  27. Tengo la impresión, querida Mirella, que haces en esta novela corta que has escrito, una especie de catarsis a través de Piera, y la intuición de que has puesto mucho de tu esencia en Piera (no hablo de biografía, sino del ser intrínseco de Piera-Mirella). Solo es una sensación, y no hace falta que contestes, menos aún ahora que estás inmersa en la enfermedad de tu hermana.
    Vamos a por tu último capítulo:

    Elio es la sonrisa, el cielo, el mar, el aire, la libertad… todo lo que quiso y no pudo ser Piera. Piera fue silencio y mutismo (mancha desvaída como se define ella), en una triste etapa de su vida, (a los 13) y apagada en contraposición a su radiante hermano Elio.

    Todo lo demás, ¡tan bien escrito!, creo que merece un poco de calma y un capítulo más, al menos, pues hay cierta precipitación que no conviene… probablemente, ya lo has dicho en algún comentario, por la dedicación a tu hermana.

    Lo más importante, te deseo serenidad y calma para estos difíciles momentos familiares. Un cariñoso abrazo que te de fuerzas amiga Mirella.
    Hasta muy pronto corazón.

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  28. Carissima è davvero un piacere leggerti, i miei complimenti per come scrivi ed esponi i fatti. Ci tengo molto a dirti quanto mi dispiace per il momento difficile che tu e la tua famiglia state attraversando, spero che tutto vada per il meglio e che tua sorella guarisca al più presto. Ti mando un grande abbraccio di cuore.

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  29. Una hermosa novela corta, Mirella. El final es casi un resumen de toda la obra. Por suerte terminó todo bastante bien.
    Lamento lo de tu hermana, espero que se mejore. Yo estoy pasando por una situación similar con mi cuñada.
    Saludos.

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  30. Hola, Mirella, espero que tu hermana se recupere lo antes posible. No te preocupes por el último capítulo, no necesita corrección y se engarza bien con los episodios anteriores. Espero que disfrutes cuanto te sea posible de la Navidad.

    ¡Ten un abrazo, te presto mi fuerza también, por si la necesitas! ^_^

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  31. Mirel querida, ojalá todo se solucione en breve. Rezo por ello. Todo mi apoyo y afecto cargadito de aché. Me gustó muchísimo este final de estructura epistolar. Espero verte pronto. Besotes.

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  32. Termino de leer el final de la historia de Piera con la sensación de que lograste el propósito de esta nouvelle, y de que le diste el desenlace perfecto. Esta carta liberadora de Piera nos muestra que pudo desentrañar el nudo de la discordia familiar, y la aprovecha para realizar un balance más maduro de su vida, repasa recuerdos, y convierte para sí, finalmente, el vínculo con Elio, en una relación sanadora, con el anhelo del perdón del destierro. Es un trabajo excelente, Mirella, que espero que algún día llegue al papel en forma de libro. Digo esto porque, como le ocurre a Piera, tengo la percepción que se trata de un escrito que tiene “tu estilo”: una honda introspección, mucha carga emocional y una profunda belleza.

    Mirella, qué decirte acerca del momento duro por el que estás pasando que no te hayan dicho. Sin embargo, lo que me sale es acercarte alguna palabra de afecto, quiero expresarte ese sentimiento. Van mis mejores deseos para que se mejore tu hermana. Pero lo más importante es mandarte mi mejor mensaje de cariño para vos. Quizás leas esto en tu casa, pero quizás lo leas a deshoras, en una clínica, en esos momentos y lugares en los cuales te podés sentir sola y angustiada. Quiero imaginarme eso, como cuando imagino lo peor por cábala, para que no suceda, buscando equivocarme patéticamente. Quiero que no estés triste y que lo que te estoy escribiendo no sirva para nada porque lo estarás leyendo en el momento en que todo haya pasado y estés, con los tuyos, festejando con una sonrisa.
    Ariel

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  33. Deseo que tu hermana tenga mejoría, muchos ánimos en estos momentos
    Mirella aunque estemos lejos las palabras siempre llegan
    Y gracias por dejarnos el borrador de la novela para conocer el final. todo un detalle por tu parte en estos momentos.
    Un abrazo muy fuerte amiga.
    Besos.

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  34. Paso para dejarte un abrazo y los mejores deseos del mundo para tu hermana

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  35. Querida Mirella, ya vi tu comentario hace un rato en mi blog. Eres muy generosa para, a pesar del poco tiempo que supongo dispones, te pases por los espacios de los compañeros.
    Te doy un abrazo fuerte fuerte fuerte que cruce fronteras y ojalá tu hermana se recupere.
    ¡Ánimo mi niña!

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  36. Jo... espero que tu hermana mejore.
    Y pronto.
    Todo mi ánimo para ti.

    Un abrazo Mirella.

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  37. Querida Mirella, aunque dices que todavía persiste la gravedad, ojalá que mejore pronto; ya verás como sale bien.

    Besos y abrazos; y gracias, ya que hasta en momentos como estos pasas a visitarme

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  38. ·.
    Lo importante ahora es que el problema de tu hermana se soluciones cuanto antes, y bien.
    De lo bien que escribes siempre he dejado constancia, y seguiré haciéndolo.

    Un abrazo, Mirlo

    · LMA · & · CR ·

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  39. Ante todo mis mejores deseos para la total recuperación de tu hermana.Ya verás; pasará el mal sueño.

    Precioso final para una perfecta y amena narración.Felicidades.

    Y mas de mil besos alados para ti y para todos tus amores

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  40. Mirella ... espero que tu hermana se vaya recuperando y podáis pasar unas fiestas con cierta tranquilidad

    Un fuerte abrazo

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  41. Carissima grazie di cuore per essere passata, spero che tutto vada meglio con tutto il cuore.
    Come di cuore di auguro un Buon Natale, tanto amore e serenità per questi giorni di festa e per sempre. Un immenso abbraccio.

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  42. Contestando a tu mensaje sobre tu hermana, siento su enfermedad y por lo que estais pasando. Muchos Ánimos Mirella. Besos.

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  43. Felices Fiestas Mirella.
    Espero que todo haya mejorado.

    Un abrazo gigante.

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  44. ¡Feliz Navidad! Mirella, mis mejores deseos para vos y para tu hermana. Un abrazo muy cálido. Te mando mucha fuerza desde el afecto que te tengo.
    Ariel

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  45. FELIZ AÑO MIRELLA, Y QUE TU HERMANA SIGA MEJORANDO.

    BESOS Y ABRAZOS.

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  46. En este 2018 que va a comenzar, te deseo mucho bueno Mirella. Espero que tu hermana vaya mejor. Feliz Año Nuevo. Seguimos.
    Besos🙅〰〰💕

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  47. SIENTO MUCHO LO QUE COMENTAS DE TU HERMANA QUERIDA MIRELLA, SOLO OS PUEDO DAR ÁNIMO, Y DESEAR LO MEJOR PARA ESTE AÑO.

    BESOS Y ABRAZOS.

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  48. He vuelto a leer los 17 capítulos, esta vez de un tirón.
    ¡Qué preciosidad de lectura! ¡Cómo la he disfrutado!
    El argumento compactado de principio a fin. Me ha encantado el ritmo narrativo y el desarrollo escénico. Lo bien construidos que están los personajes, se levantan del texto, hablan, odian, sufren… ¡Cuánta soledad y vacío! El universo emocional que se nos insinúa desde el principio y que vamos descubriendo, los humaniza.
    El gran peso y la mayor valía, las mujeres; aunque los hombres piensen que son ellos los que mueven los hilos. Igual que en la sociedad. Piera es tan auténtica, cómo me alegra lo bien encaminada que la dejas, se lo merece: “caminé con la tristeza cosida a los ojos y una sonrisa amable para enmascararla”; cómo calan frases como esta. El personaje de Sonia, magistral. Te dan ganas de darle un abrazo y como lectora te alegras que se entienda con Piera.
    Me admira tu habilidad literaria con las descripciones, son tan bellas, tan poéticas, que parece que pintas con las palabras; la cadencia, el rico y preciso lenguaje, las originales y brillantes metáforas…
    Muy oportunas las aclaraciones sobre el lenguaje de la zona
    Gracias por regalarnos algo así, escribes divino, Mirella

    Espero y deseo de corazón que a nivel personal las cosas estén bien, sobre todo con lo de tu hermana. Ha pasado tanto tiempo que seguro que ya está todo superado.

    Mi cariñoso abrazo.


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    1. ¡Me alegraste este domingo gris y lluvioso! Infinitas gracias por tu lectura, fuiste la única que lo leyó a fondo y de un tirón y qué hermoso comentario me dejaste. Me encantó tu breve pero sustanciosa reseña, María Pilar.
      Los últimos capítulos no pude responder a los comentarios por la situación personal. Lamento decirte que las cosan no van a mejorar, el daño cerebral de mi hermana no es reversible y está en un estado estacionario por el momento, pero muy delicada.
      Te dejo un enorme y afectuoso abrazo y una multitud de besos.

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  49. Hola Mirella. Llego a esta novela tuya por el final...me encanto...en mi próxima visita saltaré hasta el principio. Abrazos.

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