A lo largo de todos los tiempos han aparecido textos orales y escritos de corta extensión. El microrrelato no es un fenómeno nuevo, sienta sus bases por el siglo XII en los llamados bestiarios medievales, donde se describen las características y hábitos de animales, para terminar con una lección moral. Entre 1330 y 1335 también aparecerán las sentencias del Conde Lucanor, escritas por el Infante Don Juan Manuel.
Pero es en la época moderna, al nacer el
cuento como género literario, cuando el microrrelato se populariza en la
literatura en español, gracias a la concurrencia de dos fenómenos de distinta
índole: la explosión de las vanguardias con su renovación expresiva y la
proliferación de revistas que exigían textos breves ilustrados para llenar sus
páginas culturales.
En general se entiende por microrrelatos o
microficciones a textos cuyo límite de palabras se ubican entre las 300 y las
500. Sin embargo los hay de apenas una línea.
Aquí van algunos ejemplos:
Aquí van algunos ejemplos:
Cuando despertó el dinosaurio todavía estaba allí.
(Augusto Monterroso)
Vendo zapatos de bebé, sin usar.
(Ernest Hemingway)
El último hombre sobre la Tierra está sentado en una habitación.
Llaman a la puerta.
(Fredric Brown)
Un microrrelato debe sorprender, la escasez de palabras colabora para que el lector piense, imagine, sueñe; en ese punto este género se puede asemejar al poético, por esa capacidad de asombrar al lector y llevarlo bruscamente a mundos desconocidos, con pocas palabras.
Grandes escritores como Jorge Luis Borges, también se dedicaron a explorar este género.
Un sueño
En un desierto lugar del Irán hay una no muy
alta torre de piedra, sin puerta ni ventana. En la única habitación (cuyo piso
es de tierra y que tiene la forma del círculo) hay una mesa de madera y un
banco. En esa celda circular, un hombre que se parece a mí escribe en
caracteres que no comprendo un largo poema sobre un hombre que en otra celda
circular escribe un poema sobre un hombre que en otra celda circular… El
proceso no tiene fin y nadie podrá jamás leer lo que los prisioneros escriben.Julio Cortázar
Historia
Un cronopio pequeñito buscaba la llave de la puerta de calle en la mesa de luz, la mesa de luz en el dormitorio, el dormitorio en la casa, la casa en la calle. Aquí se detenía el cronopio, pues para salir a la calle precisaba la llave de la puerta.
(de "Historias de Cronopios y de famas")
Gabriel García Márquez
El drama del desencantado

Se suele apelar a ciertos recursos
para que el microrrelato sea más efectivo:
*Sorprender al lector con una lógica inesperada.
La fuerza del destino (Julia Otxoa)
El perro riñe al gato, el gato al ratón, el ratón a la musaraña, la musaraña a la araña, la araña a la mosca, la mosca a la hormiga, la hormiga a la pulga, pero la pulga como es tan pequeña, no tiene nadie más pequeño a quien reñir, así que indignada, prepara la revolución para derrocar al perro.
***
*Utilizar un formato popular, no literario.
Un formato moderno al que recurre el microrrelato con frecuencia es el anuncio clasificado.
Clases de gimnasia (Ana María Shua)
Clases de gimnasia (Ana María Shua)
Para
aumentar la flexibildad del tronco y ramas, evitando así quebraduras
provocadas por ráfagas intempestivas, clases de gimnasia para árboles se
ofrecen, individuales y a domicilio. Precios especiales para bosques.
***
*Hacer uso de la ironía
Libertad (Juan José Arreola)
Hoy proclamé la independencia de mis actos.
A la ceremonia sólo concurrieron unos cuantos deseos insatisfechos, dos
o tres actitudes desmedradas. Un propósito grandioso que había ofrecido venir envió a última hora su excusa humilde.
***
Estos dos microrrelatos son mi autoría:

Tenía una mirada que se te metía adentro, hacía una recorrida indiscreta y salía llevándose todos tus secretos.
Dorar la píldora
Fue al botiquín del baño, vació los frascos con las cápsulas de aceite de tiburón, los comprimidos anticelulitis, aquellos con las pastillas para dormir y los pintó con un pigmento dorado, los roció con esencia de mentol y los selló con un fijador acrílico.
A la semana la internaron de urgencia. No tuvo necesidad de darle la noticia.
Mirella S.
Mirella S.
Mirella has descrito a la perfección esta forma literaria de escribir llamada microrrelatos cosa que te agradezco, ya que desconocía sus reglas como el número de caracteres a emplear y demás, así como su curioso origen. Luego nos has ilustrado con unos breves y variantes microrrelatos de personajes célebres y has puesto el broche de oro con dos microrrelatos tuyos de excelente calidad. Gracias por esta entrada, ya que me ha gustado y he aprendido. Muchas gracias por tu constante visita en mi espacio.
ResponderEliminarBesos Mirella.
Es grato saber que lo que he publicado provocó interés.
EliminarGracias también a vos Rafa, porque siempre me dejás palabras estimulantes y elogiosas, que recibo con mucho cariño.
También por estar siempre.
Rafa, un abrazote.
Los microrelatos, los cuentos cortos (Monterroso, por ejemplo) y ahora los Haikus. No son novedad pero si que su utilización se está extendiendo mucho.
ResponderEliminarMe ha gustado tu explicación y tu entrada. Un abrazo
Ester, traté de hacerla lo más simple y amena posible y me alegra que la hayas disfrutado.
EliminarOtro abrazo de vuelta.
acá son pan diario como recursos en los talleres de literatura
ResponderEliminarla condensación es una herramienta eficaz para sacar el ripio de todo texto
abrazos y buena jornada
Elisa, por estos lados también se está expandiendo este género. Como soy bastante curiosa y me gusta experimentar, hago el intento en las distintas formas literarias.
EliminarEl micro es interesante, pero tengo claro que no es para mí como modo continuo de expresión.
Te dejo un gran abrazo.
Hoy he aprendido muy contigo, no tenía ni idea de cuando nacieron los micros, me ha parecido increíble y lo vemos como algo de estos días... Madre mía!!!
ResponderEliminarMe encanta los micros que has elegido son geniales. Quizás me lleve alguno para Facebook para culturizar un poco... :)
Muchas gracias por tu clase literaria Mirella :)
Qué bueno que te sirvan, Nieves. No fue para nada una clase literaria, tan sólo abordar un género que se está difundiendo mucho, y para escuchar opiniones.
EliminarMuchos besos.
Acá leo algunos microrrelatos que desbordan belleza. Un abrazo.
ResponderEliminarElegí los que me parecían más representativos e interesantes. Es bueno saber que la pegué. Gracias Darío por pasar y abrazo.
EliminarPasó toda su vida mirando, miraba sin tomar nota de lo que veía... al final todos creyeron que era una estatua.
ResponderEliminarBesos,
Saudades
Muy bien Sau, hiciste tu propio aporte, felicitaciones.
EliminarGracias por la visita y el regalo.
Abrazo.
Gracias por estas microlección y microcolección de relatos.
ResponderEliminarEl resultado que se lee es siempre una parte mínima de la dedicación que ha necesitado.
Un abrazo
Preparo estos "miércoles rojos", así llamados por que tratan de la pasión literaria, con mucho entusiasmo. Es apenas una breve introducción a un género que se está difundiendo mucho y del que me parece bueno conocer un poco sus orígenes y sus resortes.
EliminarAbrazo, Victor.
muy completa la entrada e instructiva
ResponderEliminartienes talento
Gracias, profe, si usted lo dice lo tomo en serio.
EliminarUn gusto su visita.
MUY BUENO MIRELLA, HABIA LEIDO ALGUNO DE ESTOS MICRORELATOS.
ResponderEliminarBUENA CLASE NOS HAS DADO HOY.
SALUDOS
CARLOS
Carlos, no lo tomes como una clase, apenas un pantallazo, tengo más material, que podría aparecer en otro miércoles, si hay consenso e interés.
EliminarGracias por acercarte siempre.
Un beso.
Muy interesante esta entrada, Mirella, y tu microrelato de "dorar la pildora", ya es ingenioso desde el título! Je! Abrazoooo
ResponderEliminarUltimamante me está fallando la intuición, porque pensaba que este post no iba a tener demasiada repercusión, pero veo que enganchó.
EliminarMe alegro y seguiré adelante buscando nuevos materiales para compartir.
Gracias Patzy y + + + abrazos.
Mirella el boquerón es un pescado de unos veinte centímetros de largo, que se cría en bancos muy similares a las sardinas, y los boquerones en vinagre es un plato muy exquisito que como bien dice su palabra se elabora con vinagre, ajo, perejil y aceite. En la red te explica muy bien como se prepara esta receta. Para que estén buenos una vez adobados los tienes que dejar unas horas para que todos los condimentos se asienten por decirlo de alguna manera, y luego ya le puedes hincar el diente que están muy ricos.
ResponderEliminarBesos y gracias por tu presencia.
Rafa, sos todo un chef, gracias por la receta y la explicación detallada. Debe ser un plato exquisito.
EliminarTe aclaro que lo otro de tu post, tampoco lo había entendido (como te habrás dado cuenta... jajaja)
Un abrazo.
Me agrada muchísimo esta entrada, Mirella, y es que muchos aún consideran que se han inventado el microrrelato, cuando es bien dilatada su historia dentro del género narrativo. Tú nos traes magníficos ejemplos en esta estupenda entrada (el micro de García Márquez -que no conocía- me parece soberbio).
ResponderEliminarLos dos tuyos, muy conseguidos. Me han gustado.
Besos.
Isbel, qué suerte que puse un texto que no conocías, porque la mayoría de los micros que aparecen por ahí son casi siempre los mismos. Sí, es excelente.
EliminarGracias por tu apreciación sobre mi modesto intento en el género, que si bien me gusta, no es lo que más me satisface como única forma de expresión.
Un beso grandote.
Me encantó el primer microrrelato, es increible como puedes decir tanto en tan pocas palabras.
ResponderEliminarUn cariñoso saludo.
Gracias Rayén por la visita, quise conocer tu blog, pero no lo encontré.
EliminarEl gran valor del microrrelato es que con pocas pinceladas tenés que presentar a personajes y una situación.
Un abrazo y bienvenida.
Sumamente interesante toda la info y los ejemplos de buenos microrrelatos que incluís en esta atípica entrada, Mirella. Te lo agradezco y, como siempre, voy a ser muy sincera y a boca de jarro si me lo permitís, para dar mi parecer sobre este género: sólo los grandes escritores se lucen con la concisión que les concede el microrrelato. Vos lo lográs en el segundo. Te felicito, ya que no me parece nada fácil, y de todos los que leo, la mayoría me resultan un flop.
ResponderEliminarDe todos modos funcionan muy bien, estimo que es debido a que vivimos tiempos en los que se tiende a apreciar la brevedad por sobre la extensión en palabras y la calidad literaria, la concisión al detallismo, y no se valora tanto la entrega personal de quien escribe, precisamente por falta de tiempo de lectura y un cierto rechazo al compromiso afectivo en el vínculo escritor-lector. Zygmunt Bauman lo encuadraría dentro del fenómeno que él describe fenomenalmente en su extenso estudio sociológico de nuestra Modernidad líquida.
Beso grande y buenas noches!
Fer
Coincido en una cuantas cosas con vos, Fer. Como ya dije más arriba, soy una curiosa empedernida y me me gusta experimentar en los distintos géneros. La poesía es la que menos me atrevo y los microrrelatos los tomo como un ejercicio de agudeza mental y poder de síntesis.
EliminarNunca los podría reemplazar por mi otra necesidad de abordar la literatura como el gran compromiso de ofrecer al lector algo que le llegue emocionalmente, y -si es posible- que le provea material que lo haga reflexionar.
Gracias por tu opinión siempre sincera, que yo aprecio justamente por eso.
Un enorme abrazo.
Buena exposición de micro-relatos llenos de elocuencia, Mirella.
ResponderEliminarNo practico este género, porque hasta ahora lo tenia minusvalorado. Pensé que cualquier frase de Sócrates o de Einstein, podía ser un micro-relato en si misma, o incluso cualquier fragmento sacado o manipulado de un libro.
Varios capítulos de "Rayuela" (Cortazar) podrían clasificarse como micro-relatos (especialmente el 68 por estar escrito en "guíglico")...Pero quizás esta obsesión por las clasificaciones es lo que me aleja de éste género.
No obstante y ya que me has provocado te dejo uno mío...."¡QUE BREVE ES LA FELICIDAD!...FIN".
Y también varios anuncios clasificados (incalificables):
SE HACEN AUTORRETRATOS DE ENCARGO.
O este ejemplo de anacoluto:
HAY BALONES PARA NIÑOS DE GOMA
O si sabes jugar al "mus" (juego de cartas muy común en el norte de España:
CAMBIO DUPLEX POR MEDIAS DE REYES.
Otro de chiste:
CAMBIO DOBERMAN POR BRAZO ORTOPÉDICO.
En fin, que todo esto se aleja mucho de lo literario (que es lo que a mi me gusta).
Un bsazo Mirella.
Tu nuevo seguidor,
Spaghetti.
Gracias Spaghetti por unirte al nido. Le conesté a unos cuantos que comentaron, que tampoco es un género en el que me gusta expresarme constantemente.
EliminarSoy una buscadora y experimentadora, pero para mí la literatura es generar otras cosas en el lector, así como le decía a Fernanda, es bucear en la profundidad de los sentimientos, diseccionar pensamientos, crear personajes con los que el lector pueda identificarse (o no)...
Agradezco mucho tu aporte, que demuestra tu gran ingenio, pero si leiste alguno de mis post anteriores, te habrás dado cuenta, que lo de hoy fue algo atípico y experimental.
Bienvenido con abrazo.
Yo se los dije...¿Qué tul? Este búho sabe por búho pero más sabe por... Me alegro por ambos.
EliminarUn beso a mis dos grandes escitores de ficción poética y queridos, entrañables amigos!!!
Fer
Gracias Fer ¡sos nuestra representante!
EliminarUn abrazo grandote.
Accipiter Gentilis
ResponderEliminarYo creí que eran dos loros.
EliminarSaludos
Mirella, es una introducción espléndida. Veo los microrrelatos como píldoras de fácil o breve digestión. Es curioso que al principio tuvieran un carácter moral, pero bien pensado casi todo al principio de la letra impresa tenía un carácter moral y no se si aún todavía...
ResponderEliminarUn abrazo. Me has hecho pensar.
Jaal, los microrrelatos hoy en día florecen por todos lados porque con un poco de práctica se aprende el mecanismo. Salvo los de los autores destacados o alguno muy ingenioso, hay demasiada mediocridad.
EliminarNo tenemos tiempo y con un micro más o menos ingenioso se sale a flote.
Cierta moralina la seguimos teniendo pegada, además siempre buscamos el "mensaje", qué quiso decir el escritor, qué enseñanza dejó...
Un abrazo.
Todo muy interesante...
ResponderEliminarAprendiendo.
Un saludo.
Bienvenida, espero que en el blog encuentres historias y temas que te satisfagan.
EliminarMuchos saludos.
Una entrada muy interesante, Mirella. Es cierto, que los micros no son ninguna novedad, pero sí que parece proliferar los amantes a este género.
ResponderEliminarEn mi blog, publico de vez en cuando, algún que otro microrrelato, con más o menos acierto.
Abrazos de azul mar :)
Hay micros que son muy buenos y cada tanto también me gusta incursionar en el género, que no es tan fácil como parece.
EliminarGracias por la visita y un abrazo fuerte.
"Tenía una mirada que se te metía adentro, hacía una recorrida indiscreta y salía llevándose todos tus secretos." QUÉ MAGISTRAL!!!
ResponderEliminarBESOS
Aquí, en Baires, a una persona así -coloquialmente- la llamaríamos "chusma" (curiosa al máximo)... de las que hay muchas.
EliminarGracias por pasar y me alegro de que te vayas con algo que te gustó.
Abrazo.
Buena colección de microrrelatos. Me gustan esas historias concentradas en frascos pequeños.
ResponderEliminarA veces es más fácil pintar con pigmento dorado que decir la cruda realidad. Buenos tus relatos.
Un abrazo Mirella
Esme, a veces no está mal "dorar la píldora", pero hay que evitar consecuencias funestas usando pigmentos tóxicos ¡jaja!
EliminarMe alegra saber que te gustó el post.
Otro abrazo.
En esta antología de microrrelatos, forma literaria algo difícil, me gustan los que has presentado: Borges, Cortázar, G.Marquez... grandes de la literatura. Pero los tuyos son geniales, el primero me ha gustado muchísimo.
ResponderEliminarTe felicito siempre Mirella, nos das cátedra.
Besos
Luján, no estoy para nada a la altura de dar cátedra, ya varios me han dicho que acá "aprenden", sin embargo no tengo ninguna formación, apenas inquietudes y pasión por lo literario.
EliminarSólo intento comunicar temas que me parecen interesantes y busco hacerlo de la manera más completa que puede permitir este espacio.
Te agradezco tu constante participación.
Un abrazo.
Esta entrada es fabulosa, Mirella. nos enseña y nos acerca mejor al mundo del microrelato.
ResponderEliminarGracias por tu paso por mi orilla y tus preguntas.
Un abrazo de Mos desde la orilla de las palabras.
Mos, es una satisfacción saber que este post sirvió para una mayor comprensión sobre el género.
EliminarConocer tu blog y empezar a conocerte es un verdadero gusto.
Gracias por tu presencia.
Abrazo.
Boa noite!
ResponderEliminarEstou encantado com teu trabalho.
Parabens
Abraços
Sinval
Gracias Sinval por tu comentario y por detenerte en el nido.
EliminarMuchos saludos.
feliz fin de semana
ResponderEliminargracias por tu huella
abrazos
También te deseo un feliz fin de semana,Elisa.
EliminarAbrazote.
Miriella: que buena entrada. Desconocía a la mayoría de ellos y te felicito por los tuyos son muy buenos. He intentado algunas veces llegar al microrrelato y he tenido poco éxito con ellos no es mi fuerte.
ResponderEliminarUn abrazo.
mariarosa
Mariarosa, tampoco es el mío, tuve un breve período en que exploré el género y escribí unos cuantos, pero me detuve ahí.
EliminarEs bueno saber que te aporté algo nuevo.
Muy agradecida por acercarte.
Un abrazo.
Siempre me han encantado los microrelatos , especialmente los de Borges y Cortázar .Tu selección me parece genial .Los tuyos tienen algo muy importante ....un final sorprendente y mágico.Un cálido abrazo.
ResponderEliminarGracias Juan, hace un tiempo hice un breve taller sobre microrrelatos. Se me ocurrió poner este post al comprobar que es un género muy difundido en el mundo bloguero.
EliminarParece que fue un acierto, porque los que se acercaron quedaron conformes.
Un gusto tenerte por aquí.
Abrazo.