En el día siento que el mundo es de los otros
mis colores se diluyen igual que una acuarela,
la boca quieta, desierta de palabras,
los ojos lacrados al asombro.
Son horas interminables, pálidas de sensaciones,
sin la tersura de esas mañanitas
que saben a lengua mentolada
o de atardeceres que se licúan en los charcos.
Los engranajes embusteros de la noche
se ensamblan en los sueños,
sus dientes me atrapan, desmenuzan,
y en la inconsciencia del dolor estoy viva.
No quiero amaneceres horadados de luces
ni voces de pájaros agasajando al sol.
Quiero a esos oscuros, que en silencio,
baten sus alas nocturnas,
me cortejan, me absuelven,
y me consagran su compañía.
©
Mirella S. — 2015 —
Su lengua mentolada
ResponderEliminarme cayo bien al resfrió
pues me moría de frió
gracias a mi enamorada.
¿También poeta, Chaly? Sos un hombre lleno de sorpresas.
EliminarBesos.
Saber sacar tajada al dolor
ResponderEliminarno es sencillo, el precio es alto
cicatrices del alma
yo al fin he comprendido que simplemente es vida
y los pájaros de la noche ayudan a desplegar alas de madrugada
..... hermoso video y sentido poema
abrazos !!
Estoy en deuda con muchos de los que pasan por aquí, ya que no puedo visitarlos con la asiduidad que quisiera, pero hay momentos complejos que requieren de toda la atención.
EliminarGracias, Piel, esperemos que vengan esas alas de madrugada.
Besotes.
En medio de los oscuros surgen destellos de luces variadas y perdidas. Es un vídeo precioso, Mirella. Te imagino disfrutando mucho haciéndolo. Gracias y besicos.
ResponderEliminarHacer un video es de gran ayuda para mí, sobre todo en estos momentos, porque me concentro de tal manera que dejo de darle vueltas al cerebro y me olvido de los problemas.
EliminarContenta de que lo disfrutaras, Angelines.
Abrazote.
siempre hay una luz
ResponderEliminarLa hay, pero solemos aprender más de las tinieblas.
EliminarBesos, Oscar.
Tus videos cada vez son mejores!...Son una justa ilustración para tus poesías. Sos una artista sensible. Bravissima! Abrazos.
ResponderEliminarMe alegro que los disfrutes, Patzy, para mí son un modo de completar la forma expresiva y también de relajante mental.
EliminarUn fuerte abrazo.
Coincido, querido Jorge. Generalmente los grandes aprendizajes ocurren en momentos de oscuridad y congoja, porque es cuando bajamos al sótano de nosotros mismos a pasar revista de los trastos que ya no nos sirven.
ResponderEliminarCuando llegan los momentos de alegría, hay que disfrutarlos, cuando vienen los del dolor hay que arremangarse y enfrentarlos para descubrir qué nos dicen.
Mil gracias y un fuerte abrazo.
El dolor lástima pero te hace ver una cara de la realidad que de otra forma sería imposible. Estupendo el video. Me ha encantado.
ResponderEliminarUn fuerte abrazo
Siempre intentamos escapar del dolor que, pacientemente, nos espera a la vuelta de cualquier esquina.
EliminarUn placer que hayas disfrutado del video, Marybel.
Abrazos y gracias.
El dolor, la angustia, lo incómodo, son los motores de la creación, así nacen las obras que nos despiertan asombro, como el video y tus palabras, sincronizadas con el alma del momento que le toca vivir. Una joya, Mirella!!
ResponderEliminarAbrazo y admiración, MIR!!
En las épocas de serenidad y alegría no tenemos tiempo de volcar esos momentos en ninguna forma artística: estamos ocupados en vivirlos. Es cuando llegan los nubarrones que necesitamos hacer catarsis y desahogarnos.
EliminarMe alegra que te haya gustado, Edu.
Un fuerte abrazo.
La oscuridad suelen ser esos momentos de tristeza, donde todo pierde vida y color. Creo que tu poema me ha llevado por esos caminos.
ResponderEliminarUn abrazo Mirella.
mariarosa
Agradezco mucho tu visita, Mariarosa, estoy muy dispersa, con demasiadas cosas para hacer frente y no los pude visitar como quisiera. Espero que la situación se decante y volver a algo parecido a la normalidad.
EliminarOtro abrazo.
QUEDÉ AGÓNICO...!
ResponderEliminarABRAZOS
Por favor, Adolfo, no te mueras... es solo un poema... jajaja...
EliminarBesos.
bien por incursionar de lleno hacia el otro lado del espejo Mirella
ResponderEliminarbucearse , hacer catarsis y desarrollar el laberinto, perdernos
morir y resucitarnos, en ello el poeta una y otra vez siempre
abrazos y buen fin de semana
De tanto en tanto, en momentos muy especiales, surge la necesidad de expresarme con un poema, que es la mejor forma de sacar las emociones.
EliminarGracias, Elisa, un gran abrazo.
Profundo poema, Mirella. Qué bien has descrito esa sensación que a todos nos invade en las horas oscuras, y no solo durante las que carecen de luz solar.
ResponderEliminarLlegan estos versos, se ciñen como un guante a la conciencia. Me siento hermanada contigo.
Un abrazo grandísimo, Mirella, y gracias por tus ánimos en mi última entrada.
Gracias, Isabel, qué mejor que la poesía -a la que respeto tanto que solo recurro a ella en los momentos de más necesidad- para manifestar oscuridades y congojas.
EliminarEs que mereces todo el estímulo y el apoyo, por la alta calidad de tus letras, guapa.
Un fuerte abrazo.
La noche nos miente con insolente impunidad.
ResponderEliminarDespués llega el día y nos abofetea.
Poema, vídeo.... todo lo haces bien.
Besos.
Nooooo Xavi, por lo menos que quede la noche para encontrar un poco de aliento y seguir...
EliminarMe da gusto que hayas disfrutado de los pajaros negros.
Un abrazote.
Buen poema, Mirell. En video precioso. Enhorabuena.
ResponderEliminarQue hacer con los pájaros negros
de las noches eternas...
Gracias, Soco, que a una poeta como vos le guste, es una gran satisfacción.
EliminarBesotes, amiga.
Que bueno el video y el poema!.
ResponderEliminarbesos
Muy amable, Karen, gracias por la visita.
EliminarAbrazos.
Me gusta la oscuridad, tanto como tu poema. Bravo, Mirella.
ResponderEliminarSaludos.
A veces la oscuridad es mejor compañera, resulta un buen cobijo para ciertos estados de ánimo.
EliminarGracias, Raúl, contenta de que te gustara.
Saludos.
La noche, ese negro manto en el que el dolor se oscurece...
ResponderEliminarAmanecerá, Mirella.
Y bailaremos bajo la lluvia.
Un besito, bella dama.
Como dos elásticos Gene Kellys...
EliminarGracias, linda Zarza, con muchos besos.